En los últimos meses, Google ha transformado radicalmente la forma en que presentamos los resultados de búsqueda: ahora, en muchas ocasiones, lo primero que vemos no es una lista de enlaces, sino una respuesta generada por inteligencia artificial. Estos llamados resúmenes de IA están diseñados para ofrecer información rápida y precisa… pero también están cambiando nuestro comportamiento online.
Menos clics, menos visitas: ¿estamos dejando de navegar?
Según un estudio del Pew Research Center, los usuarios que reciben un resumen de IA en sus búsquedas hacen menos clics en enlaces y, con más frecuencia, finalizan su sesión de navegación inmediatamente. Esto representa un problema para los sitios web informativos que dependen del tráfico orgánico para generar ingresos publicitarios.
Lily Ray, experta en SEO, advierte que algunos sitios han visto caídas del 30% o incluso el 40% en su tráfico desde que Google implementó esta función. “Los resúmenes de IA están eliminando el incentivo para crear contenido de calidad”, explica.
¿Desaparecerá la web tal como la conocemos?
Google insiste en que esta evolución no afecta negativamente al tráfico web global, argumentando que los resúmenes enlazan con más fuentes y ofrecen una experiencia más rica. Sin embargo, tanto Pew como múltiples analistas señalan lo contrario: entre un 30% y un 70% de caída en clics según el tipo de búsqueda.
Paradójicamente, la propia IA de Google —Gemini— reconoce el impacto negativo que estos resúmenes están teniendo en los sitios web.
¿Más útil… o menos libertad para elegir?
Otro de los problemas es la fiabilidad de estos resúmenes: no son infalibles. En ocasiones, la IA puede ofrecer respuestas erróneas o incluso absurdas. Y lo más preocupante, según los expertos, es que nos está robando la oportunidad de contrastar información, comparar fuentes y tomar decisiones informadas.
Ray sostiene que, aunque la IA puede ofrecer comodidad, también puede conducirnos a una pérdida progresiva de control sobre la información que consumimos. “No es solo una cuestión de tráfico. Es el derecho del usuario a elegir lo que quiere leer”, afirma.
¿Estamos sacrificando demasiado por comodidad?
Google defiende que está mejorando la experiencia del usuario. Pero, si los sitios web que generan contenido dejan de recibir visitas, podrían desaparecer. Y eso no solo afecta a los creadores: afecta a la diversidad, la independencia y la profundidad del conocimiento disponible en la red.
El futuro de Internet podría estar en juego. Porque el problema no es que estemos haciendo clics en los sitios incorrectos. Es que estamos dejando de hacer clic por completo.